CURACAVI.- Durante todo el Mes de la Infancia y la Educación Inclusiva, se realizó una serie de actividades en diversos establecimientos educativos municipales. El objetivo de estas actividades fue informar y concientizar a los estudiantes acerca de la diversidad, la importancia de nuestras diferencias y similitudes, así como el valor de los distintos procesos de aprendizaje y la educación inclusiva.
El pasado jueves 31 de agosto se culminó este maravilloso mes con un acto final que transformó nuestra Plaza Presidente Balmaceda en un centro de eventos inclusivo. En esta ocasión especial, contamos con la participación de docentes y alumnos de los establecimientos municipales, así como del Centro de Rehabilitación Municipal.
Se cree firmemente en el poder del juego, ya que permite a nuestros niños y adolescentes imaginar, explorar y representar diversas situaciones. A través del juego, descubren habilidades, expresan emociones y nos muestran su forma de ver el mundo.
Durante todo este mes, en Curacaví se ha promovido la idea de que la educación inclusiva es un camino hacia un futuro más igualitario y solidario. Valorando la diversidad y celebrando la riqueza que aporta a nuestras vidas. Cada niño y niña es único, y en la comunidad educativa, se fomenta ese punto.
También se agradeció a todos quienes hicieron posible este Mes de la Infancia y la Educación Inclusiva, y se felicitó a los estudiantes por su curiosidad, empatía y espíritu inclusivo, que sirve para crear un cambio de mentalidad en el futuro.
